El Sábado Santo es una experiencia de docilidad Post Trauma

El Sábado Santo es un día propicio para hablar del síndrome de la docilidad post trauma. Con esta expresión nos hacemos referencia a esta tendencia a ser dóciles, sumisos e incluso inactivo después de una experiencia traumática, por miedo y como una medida de sobrevivencia. “Yo me quedo en casa”, en relación con el coronavirus, pero sobre todo con lo que puede pasar después del coronavirus, sirve para explicar mejor lo que quiero decir.  El Sábado Santo es una experiencia de docilidad posterior al trauma para los cristianos. Cualquier cristiano que tenga un poco de conocimiento de la Sagrada Escritura sabe de lo que estoy hablando.

Después de que Jesús es arrestado en el Jardín de Getsemaní y luego asesinado, todos sus discípulos y apóstoles escapan y buscan escondites. El escondite de Judas es el suicidio cuando se da cuenta de que los eventos que pensaba que había planeado tan bien se desbordan y salen fuera de su control.

Pedro hace exactamente lo mismo que Judas, solo que su suicidio es psicológico y se podrá ser redimido por el amor. Al negar a Jesús, él se niega a sí mismo y a todo lo que tiene que ver con su identidad. (Mateo 26: 69-74)

69 …Y Pedro estaba sentado en el patio, y una sirvienta se acercó a él. “Tú también estabas con Jesús de Galilea”, dijo. (como haciendo referencia a la historia de Pedro porque todo comenzó en Galilea) …70 Pero él lo negó delante de todos ellos. "No sé de qué estás hablando", dijo. 71 entonces salió a la puerta de entrada, donde otra sirvienta lo vio y dijo a la gente de allí: «Este hombre estaba con Jesús de Nazaret." (Representando los gustos y disgustos de Pedro, su mayor sueño, el amor de su vida, él había renunciado a todo en su vida por su amor para la persona y al mensaje de Jesús de Nazaret.) …72 Él lo negó de nuevo, con un juramento: “¡No conozco a ese hombre!73 Después de un rato, los que estaban allí se acercaron a Pedro y dijeron: “Ciertamente eres uno de ellos; tu acento te delata. (Las raíces de Pedro, su su patrimonio genético, antropológico e histórico, un derecho de nacimiento, representado por su acento) 74 Entonces él comenzó a maldecir y a jurar: "¡No conozco al hombre!”

Estaríais todos de acuerdo conmigo, que un hombre que niega su historia, sus raíces, sus sueños, el amor de su vida y su identidad, es un hombre muerto. Pero paradójicamente Pedro y todos los apóstoles lo hicieron para sobrevivir.

La experiencia de los seguidores de Jesús es una experiencia común para nosotros los seres humanos. Después de una experiencia traumática, todo lo que queremos hacer es desaparecer de la faz de la tierra o sobrevivir por cualquier medio, incluso si eso significa una muerte psicológica. Condicionados y domesticados por el miedo, nos volvemos dóciles y podemos ser guiados por la nariz por cualquiera y a cualquier lugar. ¡¡¡Todo por el miedo!!! Esto es supervivencia, sí, es existencia, sí, pero no es vivir en plenitud.

¿Qué hacemos entonces? ¿A dónde vamos desde aquí? La respuesta es simple pero compleja; emprender el viaje más largo de su vida, el viaje hacia adentro. Ese es el significado del silencio del Sábado Santo. Los cristianos dicen vigilar y orar. A cada ser humano digo, cultiva tu jardín interior. Manténgase despierto, esté atento y cultive su fuerza mental, espiritual y emocional para vencer el miedo. Vuelve a tu ser interior, rastrea tus raíces, tu historia, la historia del amor en tu vida, tus sueños rotos y atice las cenizas en una llama. Se trata primero de ti. Encontrarte a ti mismo y solo entonces estarás disponible para otros. Aprovecha este frío invierno y siembra las semillas de tu libertad, la nueva primavera, tu renacimiento sin miedos. Esto es lo que los cristianos llaman la resurrección.

¡A todos los cristianos les digo Felices Pascuas!!!

Y a todos los que no lo son, os digo ser felices, tened esperanza y manteneros positivos. Hay vida después del coronavirus. ¡Venceremos y seremos más fuertes!

- T. V. King.